lunes, 7 de marzo de 2011

EU permitió que miles de armas pasaran a México: Agente

CIUDAD DE MÉXICO.- Un agente de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) reveló que mediante una operación de dicha agencia se permitió que miles de armas de asalto pasaran a México y las muertes que éstas provocaron se cuentan no sólo de este lado de la frontera, sino también en Estados Unidos.
Ayer, mientras el presidente Barack Obama ofrecía a Felipe Calderón detener la venta de armas y juntos analizaban la posibilidad de que agentes estadunidenses en terrotorio nacional porten armas, el programa de reportajes de Katie Couric en la cadena televisiva CBS transmitió una entrevista con el agente federal John Dodson, donde revela que la ATF emprendió la operación “Rápido y Furioso” para rastrear las actividades del narco.
Pero el programa no dio resultados, y la agencia se rehusó a escuchar las exigencias de sus efectivos, que advirtieron de las graves consecuencias que dicha operación llevaba consigo, respondiendo que “si se quiere hacer un omelette, deben romperse algunos huevos”.
La operación fue aprobada por el Departamento de Justicia, con el fin de dejar que las armas fluyeran, crear un gran caso y terminar con un cártel. “Y se le ocultó a México”, explicó CBS.
Incluso, los agentes de la ATF grabaron imágenes de abastecedores comprando armas y documentaron la manera en que luego emergieron durante la comisión de crímenes en nuestro país, notando que se producía una brutal escalada de homicidios.
Por ejemplo, en un correo electrónico enviado por el supervisor de la operación explicaba que “en marzo de 2010 habían ocurrido 958 homicidios, el mes más violento desde 2005 (…) En dicho mes, se registró la venta de 359 armas, incluyendo numerosos rifles Barrett calibre .50″.
Para disuadir a los agentes de quejarse por ejecutar la operación, la ATF les comentó que “si pensaban que no era divertido y creían estar en la línea equivocada, quizás en el condado de Maricopa les contratara como agentes de detención y les pagaran por dar de comer a los internos”.
El 14 de diciembre de 2010, el agente de la Patrulla Fronteriza Brian Terry fue abatido con una de las armas rastreadas en la operación “Rápido y furioso”.
El agente Dodson dijo lamentar haber sido parte del plan de la ATF. “Me sentía culpable. Es aplastante. No sé cómo explicarlo. En primer lugar, me gustaría decirle a su familia que lo siento”, dijo en el programa.
Sobre el tema, CBS dijo que Kenneth E. Melson, director interino de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, se limitó a decir “que se reunirá un grupo especial para examinar su estrategia nacional de tráfico de armas de fuego”.
Entre los documentos del caso mostrados por CBS, están los seguimientos de la ATF a algunas armas, los reportes del programa Gunrunner y la carta del senador Charles E. Grassley al Abogado General de Estados Unidos, Eric Holder, quien no respondió a las peticiones de intervención en el tema.
De hecho, Grassley acusa obstrucción de la justicia.
Ninguna persona ha sido detenida como resultado de la operación “Rápido y furioso”, y de acuerdo con Dodson, miles de armas que son parte de la misma, siguen en las calles de México.