sábado, 8 de septiembre de 2012



Cuatro temas torales de la iniciativa laboral de Calderón
Arturo Alcalde Justiniani
L
a iniciativa de reforma laboral de Calderón exhibe una marcada incongruencia entre la exposición de motivos y el contenido desarrollado en sus artículos. Se apoya en un conjunto de declaraciones sin ningún efecto práctico, que buscan confundir, haciendo creer que la enmienda logrará más empleo y mayor competitividad. Su texto específico, muy distinto a lo que varios comunicadores afirman, es un intento por reducir el costo de mano de obra, abatir la estabilidad en el empleo, favorecer el despido barato e incrementar el sistema de control empresarial sobre la contratación colectiva.
El señuelo consiste en hablar de trabajo decente, igualdad de género, modernización procesal y de conceptos como dignidad en el trabajo y productividad, cuando sus efectos reales generarían más precariedad e incapacidad para construir relaciones laborales decentes, sustentadas en una negociación colectiva auténtica.
Los verdaderos autores de la iniciativa (cinco abogados de la Confederación Patronal de la República Mexicana, Coparmex) buscan lograr, entre otros, cuatro objetivos torales: El primero pretende suprimir la responsabilidad patronal a través de una subcontratación sin protección. Si bien en la iniciativa se afirma que este nuevo régimen busca evitar la evasión y elusión del cumplimiento de obligaciones a cargo del patrón, la verdad es que pretende encubrir las obligaciones de los beneficiarios del servicio a través de una triangulación con los llamados subcontratistas, que sólo están obligados a cumplir con los derechos mínimos, salario mínimo y seguridad social.
En cinco artículos –13, 15A, 15B, 15C y 15D– se destruyen los principios básicos que rigen las relaciones laborales, que parten de la premisa de que quien se beneficia del trabajo de otro, es el verdadero patrón y asume responsabilidades como tal. Se propone encubrir esta obligación con un contrato mercantil, que revierte las cargas laborales al subcontratista, quien normalmente es una figura simulada para que el verdadero patrón se escabulla. En realidad, lo que se pretende es abrir la puerta legal para homologar a la baja las condiciones de trabajo. De aprobarse la iniciativa, el subcontratismo se convertirá en el régimen común porque no está debidamente regulado, el futuro será tan sólo de derechos mínimos; por otro lado se afectan el fisco y el régimen de seguridad social.
No es recomendable cancelar cualquier forma de subcontratación sino regularla adecuadamente, como han hecho en otros países; dejar claro que debe ser excepcional, y nunca aplicable a todos los trabajadores. Debe justificar el valor agregado al proceso productivo por la especialidad que aporta, ya que no sería rentable para el beneficiario cubrirlo con trabajadores propios; debe ser temporal, registrado, vigilado por la autoridad y sujeto a sanción en caso de abuso, pero estas consecuencias deben ser para el verdadero patrón y no para el subcontratista, como absurdamente propone la iniciativa. En otras palabras, se trata de un planteamiento totalmente al revés.
El segundo objetivo está bastante escondido en el último párrafo del artículo 83 que contempla el contrato por horas. Argumentan sus defensores que se trata de colocarnos al nivel de los países desarrollados y suelen utilizar como ejemplo el modelo Volkswagen en Alemania. Nada más lejano a la realidad mexicana, no sólo porque el salario es quince veces mayor, sino también porque estas formas de contratación se generan en el entorno de negociaciones colectivas con sindicatos auténticos y en esquemas por rama de industria y cadena productiva. Conforme a nuestra ley vigente, existe la posibilidad del pago por horas, e incluso de jornadas reducidas, lo que desmiente la propaganda plagada de falsedades que se ha echado a volar junto con la presentación de la iniciativa. La intención responde a un viejo sueño de la Coparmex, que consiste en suprimir en una nueva forma de contratación, los derechos de estabilidad, antigüedad y prestaciones. Al pagar la hora se agota toda la obligación, como si fuera una simple mercancía.
El tercero, está contenido en el artículo 48 y busca cargar en los hombros de los trabajadores la creciente tardanza de los juicios laborales cuyo promedio fluctúa en alrededor de cinco años. Propone Calderón que el límite máximo de pago de salarios caídos, sea de un año, siempre sobre el supuesto de que el despido sea injustificado y que el trabajador aguante hasta el final, una medida absurda que busca soslayar que la solución es garantizar juicios rápidos, obligación que corresponde al Estado como administrador de justicia. Admitir la propuesta incrementaría aún más la lentitud de los juicios, invitaría al despido injustificado, sobre todo de trabajadores con mayor antigüedad o mejores salarios, y también de aquéllos que ejerzan la representación y defensa laboral.
La cuarta finalidad es suprimir el de por sí reducido espacio de la contratación colectiva y blindar los contratos colectivos de protección patronal, contrario a lo que señala la exposición de motivos. El mecanismo consiste en obstaculizar a través de requisitos insalvables el derecho de los trabajadores a cambiar la representación sindical impuesta por el patrón. Basta leer el artículo 899 A, fracciones III y IV, para observar los llamados requisitos de procedibilidad, sin los cuales no se dará siquiera trámite a una demanda, se exige que los trabajadores inconformes entreguen a la Junta una lista con sus firmas y datos personales, que desahoguen previamente un procedimiento de afiliación supervisado por la autoridad y obtengan una certificación favorable por parte de ésta, requisito francamente grotesco si consideramos que cuando se habla de autoridad, estamos refiriéndonos, en el caso de las Juntas, al representante del propio patrón, del gobierno y del sindicato hegemónico en la zona, que normalmente es el demandado, ni más ni menos, el que suelen escoger los patrones para firmar un contrato colectivo inicial de protección patronal.
Por un lado, proponen voto secreto, transparencia y rendición de cuentas para los sindicatos, pero por el otro, ahorcan la contratación colectiva, obligando a que el patrón decida siempre cuál sindicato debe representar a los trabajadores.

martes, 21 de agosto de 2012

MANIPULACIÓN DE LOS MEDIOS

Noam Chomsky y las 10 Estrategias de Manipulación Mediática

El lingüista Noam Chomsky elaboró la lista de las “10 Estrategias de Manipulación” a través
de los medios.
1. La estrategia de la distracción
El elemento primordial del control social es la estrategia
de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas
importantes y de los cambios decididos por las élites políticas y económicas, mediante la
técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes.
La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público
interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la
psicología, la neurobiología y la cibernética. ”Mantener la Atención del público distraída, lejos
de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al
público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como
los otros animales (cita del texto ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.

2. Crear problemas y después ofrecer soluciones.
Este método también es llamado
“problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar
cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea
hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u
organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de
seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para
hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el
desmantelamiento de los servicios públicos.

3. La estrategia de la gradualidad.
Para hacer que se acepte una medida inaceptable,
basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que
condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas
durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad,
flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos
cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.

4. La estrategia de diferir.
Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de
presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento,
para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio
inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el
público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar
mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para
acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el
momento.

5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad.
La mayoría de la publicidad dirigida
al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente
infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de
poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más
se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se dirige a una persona como si
ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella
tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un
sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas
para guerras tranquilas”)”.

6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión.
Hacer uso del aspecto
emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y
finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro
emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas,
deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…

7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad.
Hacer que el público sea
incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su
esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más
pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las
clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposible de alcanzar
para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.

8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad.
Promover al público a
creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…

9. Reforzar la autoculpabilidad.
Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable
por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades,
o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se
auto desvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la
inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!

10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen.
En el transcurso
de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente
brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídos y utilizados por las élites
dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha
disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como
psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él
se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un
control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí
mismos.

“Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a
mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando.
Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento.
Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror. Haga circular esta
información”.

Rodolfo Walsh

martes, 7 de agosto de 2012

LA DEMOCRACIA EN MÉXICO, ASIGNATURA PENDIENTE



México, entre el Jurásico y Egipto



Pedro Miguel                                                                                                  Punto Final

En pleno verano de 2012 México se vio de regreso a 1988, cuando el régimen del Partido Revolucionario Institucional (PRI) se renovaba a sí mismo con votaciones fabricadas y candidatos mágicos que lograban sobreponerse a la más honda de las aversiones populares para convertirse en mandatarios electos.

Tal vez para algunos lectores extranjeros suene disparatado hablar de régimen priísta cuando, según se sabe, el país lleva doce años bajo gobiernos emanados del derechista Partido Acción Nacional. El dato que falta para comprender a cabalidad la apreciación es que la sonada alternancia presidencial del año 2000, que habría debido ser histórica, fue, en cambio, mera historieta: para entonces, Acción Nacional había cogobernado con el PRI en una alianza de facto establecida desde 1988, cuando ayudó al aspirante presidencial priísta derrotado, Carlos Salinas de Gortari, a imponerse en la Presidencia. A partir de entonces, el sistema político dejó de ser monopartidista para transitar a un modelo binominal estructurado alrededor de acuerdos básicos: imposición del recetario económico neoliberal, disolución paulatina del Estado de bienestar, desmantelamiento del Estado laico, integración económica con Estados Unidos y supeditación política a Washington. En ese lapso, el poder político real fue transferido de la vieja nomenklatura priísta, nacionalista, autoritaria y corrupta -desbancada por los tecnócratas neoliberales educados en universidades del vecino del norte-, a una cúpula político-mediático-empresarial no menos corrupta ni menos antidemocrática, pero desprovista de nacionalismo.

Desde entonces, esa oligarquía ha venido dictando los programas de gobierno y las reformas legales necesarias para transferir riqueza colectiva a manos privadas, para recortar derechos políticos, económicos, humanos, colectivos y de género. La famosa alternancia presidencial del año 2000, entre priístas y panistas, pudo realizarse en forma tersa y fluida porque el poder real ya no estaba en la Presidencia sino en los grandes empresarios, los concesionarios de la televisión, los consejos de administración de los bancos que dominan la economía y last but not least, la embajada de Estados Unidos.

Entonces, muchos votantes creyeron de buena fe que con la salida del Revolucionario Institucional de la residencia presidencial de Los Pinos terminaría el largo periodo de autoritarismo y corrupción característicos de las administraciones de ese partido. Pero Vicente Fox gobernó con él, benefició a sus integrantes más corruptos con una plena impunidad y heredó la maquinaria de complicidades y generación de consensos mediante el reparto de prebendas y un completo repertorio de instrumentos para cocinar fraudes electorales. Sin el PRI en la Presidencia continuaron los cacicazgos locales, la política económica generadora de millones de pobres y de media docena de nuevos integrantes en la lista de Forbes, los acuerdos bajo la mesa con la delincuencia organizada y el enriquecimiento astronómico de los integrantes del equipo gubernamental. Seis años más tarde, la mayoría del electorado dio la espalda al PAN en las urnas, pero para entonces ese partido ya dominaba el arte de torcer la voluntad popular.

El fraude del año 2006
En un libro de reciente aparición, La cocina del Diablo, el antropólogo y politólogo Héctor Díaz-Polanco recopila una serie de trabajos de científicos e investigadores que demuestran, mediante minuciosos análisis estadísticos de los resultados oficiales, la derrota de Felipe Calderón y el triunfo de Andrés Manuel López Obrador en la elección de 2006. En el libro no sólo se describe la manera en que el Instituto Federal Electoral (IFE) infló la votación de Calderón -mediante la transferencia ilegal de 5% de los sufragios recibidos por el aspirante priísta, Roberto Madrazo- para que quedara arriba de López Obrador con un margen de 0.56%, sino también la forma en que las televisoras privadas y los intelectuales del régimen contribuyeron a convertir en verdad oficial aquella impostura y a desacreditar y acallar a quienes, números en mano, señalaban que la victoria del panista era insostenible. A la postre, Calderón fue impuesto en la Presidencia con la ayuda invaluable de los legisladores del PRI -así devolvieron al PAN el favor de 1988- y con la intervención de la embajada de Washington, como lo puso de manifiesto, años más tarde, un cable de WikiLeaks.

Entonces, como ahora, las diferencias entre los tres principales candidatos podían reducirlos a dos. Los proyectos de nación enarbolados por el PAN y por el PRI en realidad son un plan de negocios basado en la concentración de la riqueza, la exportación neta de capitales y de mano de obra y el desmantelamiento continuado de la propiedad pública, para transferirla, a precios de remate, a manos privadas.
Si los comicios de 2000 fueron una suerte de referéndum sobre el balance de 70 años de gobierno priísta, en los de 2006 lo que estaba en tela de juicio era el desempeño del ciclo entero de administraciones neoliberales. La voluntad popular le fue adversa pero el régimen impuso a un presidente espurio. Seis años después, y con el país hundido en las últimas consecuencias del neoliberalismo (miseria multiplicada, desempleo al alza, degradación institucional sin precedentes y una violencia delictiva fuera de control), el referéndum volvió a plantearse: tres candidatos de la continuidad político-económica (Josefina Vázquez Mota, por el PAN y Gabriel Quadri, por el partido Nueva Alianza, además de Peña Nieto, por el PRI) frente a uno, López Obrador, que volvió a la arena electoral con una nueva organización política forjada en seis años y con presencia en todo el país (el Movimiento de Regeneración Nacional, Morena) y un programa concebido y redactado por una cuarentena de intelectuales progresistas.
Aparicion de Peña Nieto

El régimen, por su parte, aprovechó ese lapso para construir una candidatura alternativa al desgastado PAN. Enrique Peña Nieto, un priísta tan jurásico como cualquier otro, fue posicionado en los medios y en las encuestas a golpe de dinero como el aspirante presidencial joven, guapo y dinámico que México necesitaba para salir de la trágica circunstancia en que lo sumió la administración calderonista. Pero la criatura se derrumbó sin la protección de las entrevistas pactadas -con respuestas leídas en telemprompter - en diciembre pasado, cuando Peña, ya precandidato, fue expuesto por primera vez a los medios. En la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, el aspirante no fue capaz de citar tres títulos de libros que le resultaran importantes.

Los tropiezos continuaron en los días y semanas siguientes, cuando el priísta no logró recordar el monto del salario mínimo vigente ni el precio de la tortilla, cuando se evidenció que no tenía claro si era candidato o precandidato y, sobre todo, cuando, en un encuentro con alumnos de la Universidad Iberoamericana, se jactó de haber ordenado, como gobernador del Estado de México, la bárbara represión policial contra el pueblo de San Salvador Atenco (mayo de 2006), episodio que incluyó un par de muertos a bala, el allanamiento sin orden judicial de cientos de domicilios, el robo generalizado de pertenencias, el apaleo ante las cámaras de centenares de personas, la tortura y violación de decenas de mujeres arrestadas, la grosera fabricación de cargos penales y la falsificación de declaraciones. (Por cierto: entre las detenidas que sufrieron agresiones graves y vejaciones se encontraba una ciudadana chilena que por entonces estudiaba cine en la Ciudad de México y que acudió a Atenco a filmar lo que ocurría. A modo de indemnización recibió una orden fulminante de expulsión del país por el gobierno democrático de Vicente Fox). Peña tuvo que abandonar el plantel a la carrera, entre gritos y abucheos, y en el resto de su campaña no volvió a pararse en ninguna universidad.
La burla devino repudio social generalizado y casi unánime, pero el dinero hizo su tarea y las encuestas mantuvieron las abultadas preferencias a favor de Peña Nieto en los sondeos de opinión. El mecanismo de este milagro ya había sido explicado años atrás por la analista política Leslie Bassett, de la embajada estadounidense, en un despacho confidencial a Washington: los pagos furtivos a medios periodísticos y empresas encuestadoras para que mantuvieran la ficción de la popularidad. A excepción de la masa mediática del régimen -encabezada por la omnipresente Televisa-, del puñado de intelectuales orgánicos del poder y del propio PRI, Peña resultaba ética, política y humanamente inaceptable para el resto del país, y se consideraba que su triunfo en las urnas sólo podría ser posible mediante un fraude masivo. Con todo, había la esperanza de que el régimen se abstuviera de perpetrar una segunda defraudación electoral al hilo y se resignara a perder el poder. A fin de cuentas, se razonaba, resulta más fácil y menos costoso ganar una elección limpia que organizar un paro general.

Comprando votos

Pero la elección no fue limpia. Desde semanas antes de los comicios fue asomando un alud de irregularidades clásicas, que iban desde la cooptación de empleados del IFE para hacer propaganda a favor del PRI y de su candidato hasta el hallazgo de boletas electorales en manos de operadores priístas, pasando por los indicios de compra masiva de votos en las regiones urbanas y rurales más depauperadas. Un dato: el heredero de Peña Nieto en el gobierno del Estado de México -la circunscripción política que rodea a la capital- invirtió unos 120 millones de dólares del erario en 170 mil tarjetas de consumo prepagadas para canjearlas por sufragios para el PRI. Unos 70 dólares, en promedio, a cambio de la voluntad política de un ciudadano. En un país con 18% de desempleo real, pérdida de 42% de la capacidad adquisitiva del salario y 52 millones de almas ubicadas por debajo de la línea de pobreza, la oferta tiene un atractivo innegable. Unos cinco millones de votos, estimó López Obrador, fueron obtenidos de esa forma en el país por el candidato del régimen.
La noche del 1º de julio se repitió, paso a paso, el guión legitimador de 2006. El presidente del IFE compareció en cadena nacional para informar que los resultados preliminares favorecían a Peña Nieto y, acto seguido, Felipe Calderón hizo lo propio para dar su bendición al supuesto triunfador. Todo ello a contrapelo de la legislación. Desde esa misma noche, los primeros grupos de inconformes se fueron a la plaza de armas de la capital -el Zócalo- a protestar contra el intento de imposición. Tras el shock inicial, las oposiciones políticas y sociales -los partidos con registro que conforman el Movimiento Progresista y Morena, por un lado, y por el otro el movimiento estudiantil #YoSoy132 y una diversidad de organizaciones sindicales, agrarias y sociales- se volcaron a la tarea frenética de recopilar las pruebas -videograbadas y fotografiadas- del fraude.
El recurso de Lopez Obrador

Diez días después de la elección, el equipo de campaña de Andrés Manuel López Obrador presentó ante el tribunal electoral un voluminoso recurso jurídico para demandar la anulación de los comicios. El organismo deberá emitir su fallo antes del 6 de septiembre. El movimiento social, por su parte, ha dado a conocer un plan de resistencia que incluye la toma de las sedes de Televisa en diversos puntos del país, manifestaciones masivas frente al tribunal electoral y, en caso de que éste decrete la validez de la elección, el bloqueo del recinto legislativo en que Peña Nieto debería, eventualmente, tomar posesión, el próximo 1º de diciembre.
A juzgar por las declaraciones de sus personeros, el régimen piensa que este conflicto post electoral es una mera reedición del de 2006, cuando los partidarios de López Obrador permanecieron más de 40 días en plantón en el Paseo de la Reforma, una de las principales arterias de la capital. Desde fuera del poder las cosas parecen distintas. En el último sexenio el poder público ha exacerbado la rabia social hasta un punto peligroso. Ya no sólo hay que lamentar los millones de desempleados y de pobres, los millones de niños sin escuela y de enfermos sin hospital, sino, además, los 70 u 80 mil muertos que le ha costado al país la guerra de Calderón, absurda y sin sentido a menos que se juzgue su utilidad desde la perspectiva de las ganancias multiplicadas del narcotráfico y de los contratistas de la industria bélica. Y el PRI ha sido partícipe y corresponsable en los Estados que gobierna de los saldos demenciales de esta aventura.

La resistencia al fraude no se limita, hoy en día, al entorno del movimiento lopezobradorista, sino que unifica y articula a organizaciones tradicionalmente opositoras al régimen con expresiones sociales de última generación, como el movimiento estudiantil surgido desde el rechazo a la candidatura de Peña, en mayo pasado -y que ha encontrado en las movilizaciones de los estudiantes chilenos una fuente privilegiada de inspiración- y el activismo febril en las redes sociales. En vastos sectores de la clase media y aun en la clase alta, la perspectiva de una recomposición del régimen encabezada por el PRI produce aversión y vergüenza.


La periodista Denise Dresser, a la que no se puede acusar de lopezobradorismo, escribió poco antes de los comicios que la vuelta del priísmo a la Presidencia equivalía a que los alemanes levantaran de nuevo el Muro de Berlín. El ingenio de la metáfora expresa claramente el malestar nacional ante este nuevo intento de imposición, pero oculta un fallo de juicio: a diferencia de lo ocurrido en Alemania tras el derrumbe del muro y la reunificación subsiguiente, la configuración del poder en México no ha experimentado cambios sustanciales y el PRI nunca abandonó el poder; simplemente se convirtió en el “Prian”, que es la expresión local para designar al brazo político y partidista del régimen. La insurgencia cívica del momento no es, en estricto sentido, contra un candidato presidencial odioso, sino contra el sistema. El hecho de que ese sistema pretenda recolocar en su fachada un logotipo partidario cargado de recuerdos amargos de represión, corrupción y soberbia, es un componente adicional del agravio, pero no el sustancial. Lo fundamental es que el consejo de administración que realmente gobierna pretende mantener encerrado al país en el Parque Jurásico. Parece ser que la paciencia social se ha agotado y que si los encargados no abren las puertas, la sociedad se encargará de echarlas abajo.
¿Qué hay más allá del Jurásico? La respuesta está a cargo del tribunal electoral y deberá emitirla a más tardar el próximo 5 de septiembre. Si el organismo jurisdiccional acepta anular la pasada elección, volverá a abrirse una oportunidad para iniciar la demolición del régimen por la vía de las urnas, pues sería improbable que el priísmo lograra montar de nueva cuenta un operativo fraudulento. Si el tribunal, en cambio, da por buenos los comicios y su resultado, bien podría estar dando paso, en México, a una secuencia social “egipcia”, es decir, una insubordinación social en gran escala dispuesta a derribar al poder establecido. Está por verse. Es posible que, en su insensibilidad y su empecinamiento, la oligarquía mexicana descubra que este país tiene algo en común con Egipto, además de pirámides.


Publicado en “Punto Final”, edición Nº 763, 3 de agosto, 2012


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martes, 31 de julio de 2012

MORENA CULTURA, ARMA DE LA RESISTENCIA


Libro digital: Fraude 2012

Escrito por Morena Cultura.

PortadaFraude2012Este documento reúne historias y testimonios sobre el fraude en las elecciones presidencialesde 2012. Supropósito es que el pueblo conozca por qué esta elección no fue ni lubre ni auténtica, como lo establece la constitución mexicana.

Además del uso propagandístico de las encuetas y la información manipulada por los grandes medios de comunicación, el PRI y su candidato llevaron a cabo una ilegal transferencia de recursos que no sólo rebasó el tope establecido por la ley para los gastos de campaña sino que sirvió para consumar la más escandalosa compra de votos que se tenga memoria en nuestro país.

Para impedir la consumación del fraude y la imposición de un presidente ilegítimo el Movimiento de Regeneración Nacional pone en tus manos este documento y te invita a conocer, reflexionar y difundir las pruebas del mayor fraude electoral que ha habido en México.

Escrito por:
Paco Ignacio Taibo II, Elena Poniatowska, Héctor Díaz Polanco, Fabrizio Mejía Madrid, Héctor Vasconcelos, Sanjuana Martínez, Pedro Miguel, Jesús Ramírez Cuevas y José Alfonso Suárez del Real.

Te dejo aquí el enlace de Morena Cultura, donde además del libro encontrarás su agenda, noticias, convocatorias, etc.

miércoles, 18 de julio de 2012

Mejor hagan la autocrítica por su responsabilidad en el desastre de España

El lastre es “El País”

Iroel Sánchez


El 17 de julio de 2011 el diario madrileño El País indicaba a los políticos españoles, con un editorial titulado “Fin de ciclo”, que era hora de deshacerse de José Luis Rodríguez Zapatero. “Debe abandonar el poder cuanto antes”, ordenaba el periódico del Grupo PRISAacerca del jefe del gobierno ibérico. Se abría así el espacio para que la derecha asumida como tal sustituyera a la que se hace pasar por izquierda y se pudiera imponer de manera más rápida -en medio de la crisis económica- la protección de los intereses que El País representa.

Pero he aquí que quienes mueven los hilos tras El País no sólo pretenden dar órdenes en España. Molestos porque cada vez les hacen menos caso en América Latina, a pesar de sus alianzas con medios como Clarín y El Nuevo Herald, y sus ataques a los procesos de cambio en el continente no logran la influencia deseada, a los directivos de PRISA ya no les basta con pretender influir en los gobiernos del subcontinente sino también aspiran a hacerlo en los partidos y las candidaturas que estos llevan a las elecciones.

Así le han dedicado un editorial al candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Andrés Manuel López Obrador, tras el controvertido proceso electoral en México, para ordenar al PRD que cambie de candidato. “Obrador es un lastre. En su propio partido, el PRD, hay dirigentes —Marcelo Ebrard, jefe del Gobierno del Distrito Federal, o su sucesor, Miguel Ángel Mancera, entre otros—, pragmáticos y dialogantes, que no suscitan el rechazo de los electores y están en mucha mayor sintonía con las realidades del México de hoy”, han dicho.

Insólito, no sólo han descalificado al candidato que una organización política de un país de otro continente decidió escoger, sino han indicado cuáles son los líderes que a su juicio sus militantes deben elegir.

La respuesta de López Obrador desde su cuenta en la red social Twitter fue contundente: ”A El País, dejen la manía de hacer periodismo colonizante. Mejor hagan la autocrítica por su responsabilidad en el desastre de España”.

Así el político mexicano recordaba cómo en el período anterior al estallido de la crisis en Europa los de PRISA pintaban el mejor de los mundos posibles y demonizaban las estrategias económicas de algunos países latinoamericanos, que ahora han resultado mucho menos afectados gracias a haberse apartado del dogma neoliberal que abrazaron los oligarcas de Madrid.

Tal vez por eso, a la más reciente Cumbre Iberoamericana, evento concebido para que los gobiernos electos por El País influyan en sus pares del continente, faltaron la mitad de los mandatarios y es muy probable que a la próxima asistan todavía menos.

No caben dudas, el lastre es El País, y al menos en América Latina son cada vez más los que se percatan de ello. Ya lo decía meses atrás el diario mexicano La Jornada al calificarlo como “el diario que representa fielmente el espíritu periodístico al servicio de los negocios”, un espíritu que -como vemos por estos días en España- antepone el dinero a la democracia. (Publicado en CubAhora)

miércoles, 4 de julio de 2012

Jornada electoral del 1o de julio





La jornada electoral del domingo 1° de julio se efectuó en forma desigual en los 300 Distritos Electorales Federales del país; en algunas zonas, como es el caso del Distrito Federal, los reportes que tenemos de incidentes son mínimos, sin embargo, en la gran mayoría de las 143,149 casillas que se instalaron en todo el país la compra y coacción del voto para el candidato de Televisa se han denunciado, se están documentando y con ayuda de muchos ciudadanos está saliendo a relucir el tamaño de esta deleznable práctica priísta, cuya imagen ilustrativa es la fotografía de la portada del periódico La Jornada del martes 3 de julio.

Amigas, amigos de MORENA, compañeros de Flor y Canto:

 1.- Convocamos a asistir a las sedes de los Consejos Distritales del IFE a partir de las 8 am del día miércoles 4 de julio y estar presentes los días jueves 5, viernes 6 y sábado 7 de julio en los recuentos que el IFE está obligado a aceptar para dar una mínima expresión de certeza a un proceso ampliamente cuestionado y viciado de origen.

 2.-Si el PRI y su candidato están tan convencidos de su “triunfo” no deberán temer en absoluto aceptar y sumarse al recuento total de votos en los Consejos Distritales. Si el IFE considera su trabajo impecable y ejemplo mundial de democracia, tampoco deberá oponerse a la apertura de paquetes electorales y el recuento de votos tal como lo disponen los artículos 295 y 298 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (COFIPE).

 3.-Convocamos a todas las mujeres y hombres conscientes, de buena fe, a no desanimarse por el golpe mediático de una elección que en términos políticos y jurídicos está en proceso; los exhortamos a estar atentos y difundir entre amigos y familiares que la imposición de Enrique Peña Nieto ni está consumada, ni la aceptaremos y que es un deber cívico y un derecho humano la defensa del voto popular ejercido con libertad.

 Confiamos plenamente en la conducción y estrategia del Lic. Andrés Manuel López Obrador y habremos de honrar nuestro compromiso de luchar, hasta el último aliento, por la transformación de la vida pública de México.



Froylán Yescas

Coordinador de la Organización Civil

Flor y Canto

miércoles, 20 de junio de 2012

Camila, globalizar la lucha y la solidaridad

“Camila, ¡Qué bueno que has traído a México este diálogo latinoamericano!”

Publicado el 6/18/12 • en Contrainjerencia
CAMILA-VALLEJO
PABLO GONZÁLEZ CASANOVA / LA JORNADA
Compañera Camila:
¡Qué bueno que ha traído a México este diálogo latinoamericano de los movimientos emancipadores! Al saber de su presencia no pude menos de recordar la voz y la fuerza de Salvador Allende y de la más profunda lucha que el socialismo parlamentario ha dado en el mundo entero.

De Allende y quienes lucharon con él es digno sucesor este gran despertar del pueblo chileno a que su juventud convoca, y que lejos de limitarse a una valerosa lucha por la educación forja un nuevo movimiento liberador de los trabajadores, de los ciudadanos, de los campesinos y de los indios mapuches.

Mucho de nuevo tiene el movimiento chileno y, como los nuestros de los que quiero decirle unas cuantas palabras, forma parte de un movimiento universal que en México iniciaron en 1994 los pueblos mayas del sureste, conocidos como zapatistas, cuyo lema es precisamente: Libertad, Justicia, Democracia.

Ellos plantearon innovaciones en los conceptos, en las palabras, en las formas de comunicación, de expresión y de organización…, algunos ejemplares para combinar el discurso político y el narrativo, el imaginativo y el práctico; otros, para identificar el conocimiento con la pérdida del miedo, y la moral de lucha con el respeto a la dignidad de uno mismo; otros más para instaurar un sistema de autonomías con democracia, a la vez participativa y representativa, la de la asamblea y la del mandar obedeciendo, y muchos otros, capaces de articular las luchas de las comunidades con las que da la nación por su independencia, y con las del mundo por lo que los pueblos andinos llaman el buen vivir.

En México surgieron otros movimientos más, como el de los cristianos herederos de la teología de la liberación latinoamericana que, con su opción por los pobres, difunden el respeto a las creencias religiosas y laicas y, en muchos casos, el pensar histórico, y que hoy –con numerosos movimientos sociales y políticos–, están organizando la lucha por La Justicia y la Paz, y contra la guerra infame que nos imponen el imperio y sus asociados nativos, una guerra que hace sus principales víctimas entre los pueblos que luchan contra las corporaciones depredadoras, y también entre los abogados que los defienden, entre los líderes que los encabezan, y entre los periodistas que expresan la verdad de lo que ocurre.

A los movimientos anteriores se añade otro no menos importante: es el de #YoSoy132, con en el que hace acto de presencia la juventud mexicana en el campo cibernético de la lucha, y muestra el inmenso poder que en ese campo tenemos para ganar las batallas de la libertad de expresión y de comunicación, las de organización de colectivos y redes de colectivos que hagan realidad la educación universal, la democracia como gobierno del pueblo, y la subsistencia de la Tierra y de la humanidad.

Este movimiento contiene, a más de muchas otras aportaciones intelectuales y culturales, la de haber descubierto que el yo es parte del nosotros: #YoSoy132

Y hay un movimiento no menos significativo que, organizado en red, cava en lo profundo de un modo de dominación y acumulaciónaltamente depredador, corruptor y destructivo. Convocó a ese movimiento el pueblo purépecha de Cherán K`eri, en el estado de Michoacán, y allí se realizó, el pasado mes de mayo, un Encuentro Nacional de Redes de Resistencias Autónomas Anticapitalistas.

La convocatoria, los discursos, las relatorías del encuentro enfrentan al capitalismo corporativo y a los complejos empresariales –militares– políticos y mediáticos, que con sus aliados y subordinados están llevando al mundo a una catástrofe ecológica que no sólo amenaza al 99 sino al 1% de la humanidad, según investigaciones de los más serios y rigurosos científicos de las propias organizaciones intergubernamentales.

Textos y discursos del congreso de Cherán K. revelan una recuperación del método histórico-político que originalmente correspondió a un pensamiento crítico y creador –el de Marx y Engels–, y que ya enriquecido por la historia universal, contribuye como pocos a comprender hoy el mundo realmente existente y a construir un mundo realmente humano y sostenible.

Pero más que pensar en forma doctrinaria los participantes, reunidos en el pueblo purépecha de Cherán K, piensan en la forma de plantear la lucha más profunda por la libertad y por la vida.

Hay mucho más que decir, pero aquí me detengo pues no vayan mis palabras a impedir que Camila Vallejo nos cuente cómo se plantea en Chile la lucha por otro mundo posible.

Escuchemos a la compañera Camila y enviemos con ella un caluroso abrazo a la juventud chilena. ¡Viva Chile! ¡Viva América Latina! ¡Viva la vida! ¡Venceremos!