martes, 1 de junio de 2010

Redefinir el rol de Estado en pos de un desarrollo sostenible e igualitario: Bárcena.



CEPAL advierte necesidad de acrecentar papel del Estado en escenario económico
BRASILIA.— El escenario económico surgido de la crisis financiera exigirá rediscutir el papel del Estado para impulsar el crecimiento, afirmó ayer la secretaria de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), Alicia Bárcena, al abrir el 33 período de sesiones de la entidad, dice la AFP.
"Es necesario realizar un profundo análisis del papel de las instituciones y de la regulación de los mercados, y redefinir el rol del Estado para generar las condiciones adecuadas que lleven a la región hacia un camino de desarrollo sostenible con igualdad", dijo Bárcena.
Los 44 estados miembros de la CEPAL y organismos multilaterales asociados iniciaron ayer la discusión de un documento que enumera las brechas que persisten en la región y propone una visión en la que el Estado pasa a ocupar un papel central en el crecimiento económico y social.
Bárcena puntualizó que la crisis económica que estalló con toda su fuerza a finales del 2008 e impactó de lleno a la región en el 2009, "puso en evidencia los déficit estructurales que obstaculizan el desarrollo" en América Latina y abre interrogantes sobre su capacidad de enfrentar el nuevo escenario.
La crisis financiera echó por tierra el progreso social de los últimos años en América Latina. La región se consolidó como la más desigual del mundo: el ingreso promedio por persona en el estrato más acaudalado supera 17 veces al que percibe el 40% de las personas en los hogares más pobres. Ese es el problema y la solución, según la Comisión Económica para América Latina, pasa por replantear la forma en que el Estado fue relegado de las decisiones económicas en las pasadas tres décadas, comentó el diario mexicano La Jornada.
El informe resalta la necesidad de un fuerte papel del Estado, al que confiere la calidad de principal actor en la conciliación de políticas de estabilidad y crecimiento económico, de desarrollo productivo, promoción de empleo y de mayor igualdad social.
De acuerdo con la agencia DPA, la caída de la inversión extranjera y la fuga neta de 63 000 millones de dólares desde el 2007 dañaron el futuro potencial de crecimiento de América Latina. La crisis, que en el 2009 provocó una pérdida del poder adquisitivo de los hogares, arrastró además a nueve millones de personas a la pobreza, dijo la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.