lunes, 9 de abril de 2012

Salvar al campo mediante Plan de Ayala Siglo XXI





La Jornada: Firmará AMLO Plan de Ayala siglo XXI en Torreón, esta tarde
Organizaciones campesinas de toda la República se reunirán en la Comarca Lagunera, zona donde Lázaro Cárdenas en 1936 inició el reparto agrario.

Lilia Ovalle, corresponsal
Publicado: 09/04/2012



Torreón, Coah. Como parte de su proyecto de nación y como un compromiso que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) creó con la estructura campesina a escala nacional, este martes Andrés Manuel López Obrador firmará el Plana de Ayala Siglo XI en esta ciudad.

En conmemoración del 93 aniversario del asesinato de Emiliano Zapata, las organizaciones campesinas y de migrantes mexicanos radicados en Estados Unidos darán a conocer el cuerpo de dicho plan, que pretende rescatar el campo nacional y la soberanía alimentaria.

En rueda de prensa Rafael Jacobo Femat, presidente estatal del Centro de Organizaciones Campesinas y Populares (Cocyp) dijo que el Plan de Ayala concentra los compromisos del candidato de las izquierdas y en el caso de la Comarca Lagunera tocará temas estructurales como la industrialización del campo, la exportación y precios de garantía de productos, así estudios técnicos hidrológicos aplicables al acuífero principal de la región.

La sobreexplotación de los mantos acuíferos en la Laguna, adjudicada a la industria lechera, será otro problema que se abordará en el Plan de Ayala del Siglo XXI y en ese sentido, coincidieron representantes de 27 organizaciones campesinas, AMLO es el candidato que ha mostrado más apertura y voluntad política para reactivar el campo en México.

En cuanto al trabajo que realizó Morena informaron, miles de familias campesinas de la región se afiliaron al movimiento ciudadano sin que para ello se les “obsequiara” una despensa, por lo cual se garantizan acciones de conciencia que redundarán en votos seguros en los próximos comicios.

“La Comarca Lagunera es de tradición cardenista desde Lázaro, y esto se reflejó en las elecciones de 1988 y hasta la fecha. El aporte en las elecciones pasadas favoreció a López Obrador, que ganó Coahuila y sabemos que lo seguirán sosteniendo”, comentó Jacobo Femat.

Por su parte Maximiliano Olvera, representante d El Barzón Laguna, consideró que la firma del pacto en Torreón tendrá una connotación histórica toda vez que

representantes campesinos de todo el país arribarán a esta ciudad.

“La Laguna es una tierra de hombres y mujeres de mucho trabajo y esfuerzo, que han hecho producir al campo en el desierto. Sin embargo el norte del país necesita despertar pues su aporte es para el PRI y el PAN. Aparte de la sequía se debe combatir en Coahuila una alta corrupción y una alta incidencia de violencia que son condiciones que no le dicen nada al futuro de los jóvenes”, precisó el presidente del Cocyp, quien destacó que la región peligra debido a la migración de ciudadanos y empresarios ante la inseguridad.

La presentación y firma del pacto se realizará en la avenida Juárez, frente a la explanada del Estadio Revolución, a las 16 horas.

El pasado 28 de noviembre, día de la conmemoración del centenario de la promulgación del Plan de Ayala por el general Emiliano Zapata y los revolucionarios del sur, AMLO se reunió con representantes campesinos haciendo un llamado para construir una nueva nación.

Así se ideó lo que se considera un pacto social para el campo mexicano, en el contexto de un nuevo proyecto de nación. Zacatecas, Chiapas, Michoacán, Yucatán, Morelos y Los Ángeles California, entre otras entidades, fueron punto de encuentro para la construcción del Plan de Ayala del siglo XXI.

martes, 3 de abril de 2012

La ciencia y la tecnología factores indispensables para el desarrollo



Los candidatos ante la ciencia
René Drucker Colín


El 23 de marzo en la ciudad de Monterrey tuvo lugar un evento organizado por la Asociación Mexicana de Directivos de la Investigación Aplicada y el Desarrollo Tecnológico (Adiat) que agrupa alrededor de mil 200 directivos de empresas tecnológicas, investigadores, académicos y rectores del país.

Ese organismo elaboró lo que llamaron la Declaración de Monterrey, con objeto de mejorar la competitividad y el desarrollo sustentable de México, a través de impulsar la llamada sociedad y economía del conocimiento. Los organizadores invitaron a los tres candidatos a la Presidencia a suscribir el documento y a expresar lo que pensaban respecto del tema. Los tres candidatos ese mismo día, pero a diferente hora, estuvieron durante hora y media manifestando sus opiniones en la materia. El primero que se presentó fue Andrés Manuel López Obrador (AMLO), a quien tuve el placer de acompañar en el presídium. Ahí se señaló que la Declaración de Monterrey tenía una coincidencia muy grande con el documento que se había elaborado por parte del candidato López Obrador en un encuentro que dos semanas atrás había tenido lugar en la ciudad de México con una cincuentena de investigadores, a quienes se describieron las estrategias que llevaría a cabo la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación que se pretende impulsar en caso de que ganara las elecciones. AMLO se manifestó sobre estas coincidencias, señalando que él impulsaría el crecimiento del sector científico y desarrollo de proyectos científicos estratégicos para la nación. Su ponencia se centró sobre qué haría para obtener los recursos que se requieren para fomentar el desarrollo científico del país.

Al término de la presentación de AMLO le tocó a Josefina Vázquez Mota. Yo me quedé a escucharla. Debo señalar que salvo en una breve intervención, cuando ella era secretaria de Educación y había participado en un evento en la UNAM, nunca le había escuchado: su participación en Monterrey me dejó claro que ella es sorprendentemente efectiva como oradora, pues acude a promover esta especie de emoción primitiva del ser humano, con lo cual mucha gente se puede identificar con ella fácilmente. Habla muy bien y es teatral. Lamentablemente para ella, pero más bien para los mexicanos, su discurso está vacío de ideas. No hubo una sola cosa sobre la Declaración de Monterrey, a la cual se refirió. Su discurso estuvo totalmente desprovisto de contenido puntual y salvo decir, sin gran convencimiento de que suscribía el documento, estaba claro que no lo había siquiera ojeado. Quedó también en evidencia que los que le escribieron su discurso, tampoco habían leído la Declaración de Monterrey con mucho detenimiento.

Josefina debería acogerse a lo que dijo el gran poeta alemán Goethe que “cuando faltan las ideas sobran las palabras”. Ella habló mucho de los niños a quienes en la educación básica les debían acercar la ciencia y bla, bla, bla, y que ella tuvo su gran oportunidad en la vida por haber ido a la Vocacional y bla, bla, bla, cosas que no tenían absolutamente nada que ver con el tema a tratar. Para mí fue evidente que la ciencia ni la entiende y ni le interesa. Y para muestra, un botón. Una de las preguntas del público tuvo que ver con cómo iba a impulsar o qué pensaba de la ciencia básica, a lo que respondió que ya había hablado de eso, aludiendo sobre lo que había disertado de acercar la ciencia a los niños que cursan los niveles básicos de educación. O sea, para ser claros, confundió la ciencia básica, la que genera nuevos conocimientos en los laboratorios universitarios con la enseñanza de la ciencia en la primaria. Está claro que si ella llegase a ganar, la sociedad y economía del conocimiento seguirá estancada y desdeñada, si no es que desaparecería totalmente como ya lo han intentado Fox y Calderón.

Yo realmente la tengo que felicitar por su capacidad artística como oradora, puede llegar a ser mesmerizante, sin embargo, es de lamentar lo vacío de su discurso. Habla mucho, demasiado y no dice gran cosa.

Por último, le tocó a Peña Nieto, a quien no me quedé a escuchar. Supe sin embargo, que su presencia estuvo acompañada de la prepotencia y que llegaron sus acólitos y manejadores de imagen a fortalecer aún más la prepotencia y a señalar, como ellos mismos dijeron, que están impulsando un producto. O sea, Peña Nieto no es un candidato, es un producto a quien quieren meter a como dé lugar en Los Pinos, aunque sea un producto cuyas cualidades son difíciles de encontrar.

El informe que escuché sobre la participación de Peña Nieto fue que hubo rollo con compromisos que se prometieron, si es que gana, pero parece sin mucha convicción, ni comprensión.

En fin, no sé si los de la Adiat quedaron contentos o no, por lo pronto hicieron un loable esfuerzo y lograron desenmascarar algunas de nuestras realidades.

lunes, 2 de abril de 2012

‘El negro’

Una historia de apenas tres párrafos se convirtió en el artículo más leído del periódico el País de España, en su página de internet. Son líneas conmovedoras sobre la inmigración, uno de los temas más delicados y que mayor preocupación genera entre los ciudadanos europeos. La anécdota que cuenta Rosa Montero es uno de los temas más comentados en redes sociales y considerada por el escritor brasilero Paulo Coelho como lectura obligada. Este es el mensaje:

‘El negro’

Estamos en el comedor estudiantil de una universidad alemana. Una alumna rubia e inequívocamente germana adquiere su bandeja con el menú en el mostrador del autoservicio y luego se sienta en una mesa. Entonces advierte que ha olvidado los cubiertos y vuelve a levantarse para cogerlos. Al regresar, descubre con estupor que un chico negro, probablemente subsahariano por su aspecto, se ha sentado en su lugar y está comiendo de su bandeja.

De entrada, la muchacha se siente desconcertada y agredida; pero enseguida corrige su pensamiento y supone que el africano no está acostumbrado al sentido de la propiedad privada y de la intimidad del europeo, o incluso que quizá no disponga de dinero suficiente para pagarse la comida, aun siendo ésta barata para el elevado estándar de vida de nuestros ricos países. De modo que la chica decide sentarse frente al tipo y sonreírle amistosamente. A lo cual el africano contesta con otra blanca sonrisa. A continuación, la alemana comienza a comer de la bandeja intentando aparentar la mayor normalidad y compartiéndola con exquisita generosidad y cortesía con el chico negro. Y así, él se toma la ensalada, ella apura la sopa, ambos pinchan paritariamente del mismo plato de estofado hasta acabarlo y uno da cuenta del yogur y la otra de la pieza de fruta.

Todo ello trufado de múltiples sonrisas educadas, tímidas por parte del muchacho, suavemente alentadoras y comprensivas por parte de ella. Acabado el almuerzo, la alemana se levanta en busca de un café. Y entonces descubre, en la mesa vecina detrás de ella, su propio abrigo colocado sobre el respaldo de una silla y una bandeja de comida intacta.

Dedico esta historia deliciosa, que además es auténtica, a todos aquellos españoles que, en el fondo, recelan de los inmigrantes y les consideran individuos inferiores. A todas esas personas que, aun bienintencionadas, les observan con condescendencia y paternalismo. Será mejor que nos libremos de los prejuicios o corremos el riesgo de hacer el mismo ridículo que la pobre alemana, que creía ser el colmo de la civilización mientras el africano, él sí inmensamente educado, la dejaba comer de su bandeja y tal vez pensaba: "Pero qué chiflados están los europeos".